Hoy vamos a presentaros una marca de carbones naturales fabricados a partir de cáscara de coco que compiten directamente con marcas conocidas como Coconara (y ahora en formato cúbico, Cocomazaya) o ChronicHookah. Estamos hablando de Cocobrico: carbones naturales algo más grandes y duraderos.
Comenzaremos con una descripción del producto a primera vista. Estos carbones naturales vienen en una caja de cartón duro, como se observa en la imagen. Este tipo de carbones sólo pueden encontrarse en formato de 1kg (con 72 piezas cúbicas en una bolsa interior de plástico).
Los Cocobrico son fabricados en Indonesia, al igual que la mayoría de los carbones producidos a partir de cáscara de coco, aunque su distribución se realiza en Europa, y sobre todo, en el mercado alemán. Su fabricación respeta el medio ambiente, ya que se aprovecha la cáscara de coco a partir de la extracción de aceite de palma.
Recomendados para shisha y barbacoa, el punto clave de estos carbones es su poder calorífico y su duración. Con unas dimensiones de 25x25x25mm, la fumada durará aproximadamente 90 minutos, aunque pueden ser dos horas si se administra bien el calor (en la caja viene indicada una duración de 2 horas y media). El poder calorífico de estos carbones es sorprendente: si fumamos en una cazoleta pequeña deberemos cortar un cubo en dos mitades, para no exponer el tabaco a demasiada temperatura. Creemos que es recomendable la utilización de dos capas de papel de aluminio para reducir el calor sobre el tabaco. En cazoletas de mayor tamaño podremos utilizar dos cubos enteros, y en cazoletas especiales (Saphire, Tangiers, Sahara Smoke (vortex), etc.) con diámetro grande y donde raramente el tabaco contacta con el papel de aluminio, los Cocobrico funcionarán a la perfección.
Como la mayoría de carbones vegetales fabricados a partir de cáscara de coco, no dejan nada de sabor en la fumada. Apreciaremos con exactitud el sabor del moassel que hayamos elegido para fumar. Además, la ceniza que dejan estos carbones es relativamente escasa, fina y muy fácil de quitar.
Sin embargo, dejaremos la única pega de esta marca para el final: el encendido. Estos carbones son bastante compactos, probablemente más que los de otras marcas, y de mayor tamaño, por tanto su encendido será también relativamente más tardío de lo "normal". Aproximadamente, los Cocobrico se encenderán completamente en 20-25 minutos (haciendo uso de un hornillo con resistencia, placa eléctrica, hornillo de gas, o aparatos similares. Se recomienda la utilización de un CocoNara Lighter (accesorio que favorece el completo encendido de los carbones, ya que eleva éstos unos centímetros sobre la fuente calorífica) a la hora de encender los Cocobrico u otros carbones en un hornillo de gas).
Como conclusión final, cabe decir que estos carbones naturales tienen un gran poder calorífico, una alta duración, no dejan nada de sabor y, si hemos seguido bien los pasos para un encendido correcto, superan con creces a otras marcas "de prestigio" más caras y difíciles de conseguir.