La uva es una fruta obtenida de la vid, donde vienen en racimos; son pequeñas y dulces. Éstas se comen frescas o se utilizan para producir, entre otros, mosto, vino y vinagre. Actualmente, la mayor parte de la uva cultivada proviene de la Europa mediterránea y Asia central. Podríamos decir que, básicamente, existen dos tipos de uva: la blanca ("white grape") o la negra ("black grape").
El tabaco que hoy vamos a presentar corresponde a Nakhla "uva" (Nakhla grapes). Se podrían destacar algunas características que apreciaríamos nada más abrir el paquete de tabaco: su suavidad y dulzor. No es un sabor muy fuerte y, por tanto, al aspirar el humo, pasa muy suavemente por la garganta y, al expirar, deja un buen sabor a uva dulce (de la cual presumimos que podría ser negra, o "black grape") con una suave esencia a miel, que probablemente no vaya incluida en el sabor, pero sí con la melaza. Este efecto se debe a que, al degustar el tabaco de uva, el sabor es poco intenso y, como en todos los tabacos de la marca Nakhla, no se utilizan tanta cantidad de glicerinas (pero sí de miel y melazas naturales) la miel se hace notar. Aparte, deberíamos concretar que el nombre original del tabaco no es uva "a secas", sino uvas (o "grapes").
Alguno de sus inconvenientes es la rápida "combustión" del tabaco. Este se quema con demasiada rapidez, probablemente debido al tipo de melaza y otros productos añadidos al preparado del tabaco (aceites, conservantes, etc.). Otro factor que encontramos en contra de dicho sabor es que, fumándolo sin mezclar con otro tabaco, puede resultar empalagoso, ya que su realismo no es excesivo.
En cuanto a su puntuación de marca, ponderaríamos en un 7 debido a las características mencionadas anteriormente; respecto a la de sabor, un 8.
Recomendamos su mezcla con otros sabores, como la menta y la fresa (sabores suaves o "fríos).
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